Contra Abogados la querella no fue suficiente.

 Después de tanto tiempo, por fin volvió nuestro torneo en su completo esplendor, es decir, no sólo volvió el fútbol sino que también festejamos la vuelta de las cantinas (los capitanes en especial) y el público en las canchas! El sábado comenzaba con una tarde prometedora, las ansias de los jugadores ya se podían notar. Algunos hacían chascarrillos, otros se quejaban de estar laburando... "Buen día equipo!!" Arengó el delegado Hernández a las 13:04hs, recién levantadito.

 Las calles de Concepción se empezaban a teñir color Zeta de a poquito y en todas las esquinas se divisaban grupitos de gente con indumentaria y merchandising del equipo.

Miles de fidedignos Z acompañaron el micro que transportaba a los jugadores
 desde la terminal hasta "La Soñada".

 

 A medida que llegaban al predio, nuestros hombres debían completar una planilla anti Covid. Hubo un momento de confusión porque desde el centro de bioquímicos J.J. Urquiza se notificó que "Gabriel dio positivo". No se sabía de cuál de los 2 se hablaba: -"El de apellido impronunciable", vociferaron. Se trataba de Gaby Casperovicz quién luego de asustarse y pensar que no jugaría, argumentó que ese era el resultado al test de sífilis, gonorrea y fiebre amarilla. Como no era covicho, pudo jugar. 

 

 Una vez finalizada la entrada en calor, el DT Pendino decide plantar una formación del tipo 4-4-2 intentando equilibrar el juego en cuanto a marca, juego limpio y proyección.

 Javi Weston encargado de ser el salvaguardias bajo los 3 palos. La saga central formó con Fabio y Agus, Adrián y Lean cubrían los laterales. 

 El círculo central de la cancha era propiedad de Casperoviz y Hernández mientras que por los costados se movieron Lucho y Juan. 

 Arriba Moyano y Joannas completaron el 11,  apostando a la velocidad y facha de los bonitos del plantel. 

 

 En el comienzo del partido La Pendineta se había convertido en una locomotora, mucha potencia física en combinación con un manejo prolijo y criterioso de la pelota en el mediocampo. Si bien no había llegadas muy claras, el dominio y la actitud generaba más entusiasmo que Messi en el PSG. 

 Llega una pelota parada vía cornerkick y el 10 susurra "va al primer palo eh", y allí mismo fue. Centro con rosca hacia el arco que el Gabylan logra desviar y el temido Fabio Gabiú corrige la trayectoria para mandarla a guardar. Festejó el gol señalando el bíceps que acaba de recibir la 6ta vacuna de Pfizer. 

 Y de a poquito vamos llegando al momento trágico del cuento... El bandido de la tarde, Lucho. Su partido venía siendo superlativo, salvo por una amarilla precoz, el resto era todo flores y arco iris. Hasta que envalentonado por el resultado y la energía que acompañaba al equipo se lanza temerariamente hacia un rival, logra tocar la pelota pero la inercia de la situación hace que se lleve pelota y humano. Y mientras esperábamos que los contrarios salgan jugando rápido, el desalmado referí jugó de villano y sumergió su mano en el bolsillo para mostrarle otra vez el cartón amarillo y como si fuera una puñalada tras otra, guarda la amarilla y le muestra una de color colorado, un horror. 

"Me cortaron las piernas" Sentenció Luciano. 

 

 A partir de dicho siniestro el partido se nos hizo cuesta arriba, el rival se lanzó con todo su asedio y nosotros nos tiramos a aguantar los trapos bien piola. 

 En uno de los incesantes ataques de los letrados la pelota va directo a la red, el frío corrió por nuestras cervicales hasta que ahí parado estaba Adrián, un Talibán firme y dispuesto a matar por defender lo suyo. La pelota le queda entre los gemelos y al grito agudo de "sacala sacala sacala" logró disolver el peligro rival, por un ratito. 

 El primer tiempo duró aproximadamente 73 minutos. No se terminaba nuuuuuunca, hasta que por fin el colegiado nos dio un respiro y nos fuimos al descanso manteniendo el 1 a 0. Cabe destacar que seguimos teniendo incursiones en ataque logrando generar peligro, pero no un 2 a 0. 

 

 El complemento siguió con la misma temática del primer tiempo, ellos desesperados por el empate, nosotros cuidando nuestro atesorado 1 a 0. 

 Hubo ciertos eventos confusos en las inmediaciones de nuestro arco, se viralizó la versión de que Agustín sintió un fuerte golpe y le exigía justicia al árbitro, Fabio se sumaba al desesperado pedido de que amonestara al rival que había golpeado a su compañero de saga. En el 3er tiempo el experimentado central se quebró en culpa y confesó que él mismo había golpeado a su compinche, pero en el momento tenía que convencer al mundo que había sido uno de ellos 😅.

 Tiro libre para el equipo rival. Un zurdazo preciso por fuera de la barrera se mete junto al palo y destroza nuestra ilusión de los 3 puntos. Mejor dicho, nuestra oportunidad. Porque la ilusión siguió intacta, el equipo se la bancó, se hicieron relevos ofensivos para intentar ganarlo de contra pero no se pudo. 

 Nos queda el sabor amargo de saber que podíamos ganarlo por el buen partido que hicimos. Pero preferimos quedarnos con que jugamos contra un rival candidato a ganar el torneo, con un hombre menos durante 3/4 de partido y aún así casi nos llevamos los 3 puntos a casa.

 A pensar en el sábado que viene equipo!!

 

El goleador del partido aprovechó la vuelta de la cantina